Hubo un tiempo en que en los pueblos había tres personas importantes: el cura, el maestro y el médico. A todos se les ponía “Don” delante del nombre y todo el mundo sabía perfectamente lo que hacía cada uno.

Hoy parece que sólo eres importante y haces algo interesante si cumples dos requisitos fundamentales:

a) que la denominación de tu cargo esté en inglés

b) que contenga un mínimo de tres palabras.

Hago esta reflexión porque Linkedin parece el sitio perfecto para echar una tarde de domingo cuando no hay nada mejor que hacer que domar la propia moral. Es todo un reto para nuestra autoestima asumir que aquel amiguete del barrio que siempre era torpe en todo ahora es “Travel & Transportation Leader and Executive”. ¡Toma ya! Ni idea de lo que es eso, pero te quedas media tarde pensando “…quién me lo iba a decir”. Así que rápidamente te pones a hurgar en la vida profesional de tus compañeros de clase y caes en la cuenta de que ninguno ha dejado de hacer cosas interesantísimas cuyo contenido es indescifrable pero que suenan estupendamente. Venga, dos minutos de pausa para echar un vistacito y ver cuánto tardamos en encontrar en la citada web la primera “Secretaria” a secas. ¡Tiempo! …….. Una sonrisa a mi favor si no me equivoco. Ni una.

Así que manos a la obra. Si su cargo no está en inglés y no tiene un mínimo de tres palabras aplíquese rápidamente, diccionario en mano, para ponerse a la altura de los tiempos. Yo ya he hecho los retoques pertinentes a sabiendas de que nada más acabar de leer este post alguno que otro iba a ir a buscar mi perfil. Habiendo cumplido con mi tarea, me despido pues de los tres personajes con los que comenzaba esta reflexión, a saber: el cura – Seniour Spiritual Developer, el maestro -Schooling Upgrader Expert y el médico – Sanitary Personal Consultant. ¿Tendrán ellos perfil en Linkedin?