Se habla mucho de emprender, parece que todo el mundo debe ser emprendedor. Se hace mucho hincapié en la formación para emprendedores, quizás demasiado en el aspecto formal de la formación, los contenidos reglados y formales. Pero se olvida el ámbito de las competencias. Los emprendedores, por encima de todo, deben aprender cuanto antes tres competencias fundamentales. A saber:
• Competencias emocionales y personales. Estas competencias le ayudarán de forma muye efectiva a desarrollar su proyecto de vida, el cual se desarrolla en paralelo con el proyecto de emprendimiento, este forma parte de su actitud vital. Así mismo le ayudarán a establecer relaciones y vínculos eficaces con las personas de su entorno. Se convertirá en una persona con la que se quiere estar. Por otro lado debe prestar mucha atención a la inteligencia intuitiva, mucho más que a la inteligencia racional.
• Competencias sociales y éticas. Son aquellas competencias que determinan el universo de las relaciones personales y la forma en cómo las mismas se van a desarrollar. El emprendedor no puede ser una persona “arisca” para con los demás y hacia los demás. Necesita crear un círculo de relaciones (un network) del que va a depender en buena medida su devenir profesional. El emprendedor se desarrolla con los demás y se debe a los demás. Al tiempo debe generar un importante código ético personal que impregne su conducta y la de de su actividad empresarial. Un emprendedor sin ética personal y sin ética en su negocio es un peligro para la sociedad, intentará depredar lo que toca en su exclusivo beneficio. Este obviamente no es un emprendedor, es un delincuente que se aprovecha de la situación. El emprendedor debe desarrollar valores tales como: transparencia, honestidad, honradez, voluntad de servicio. Y estos valores deben estar presentes en todo momento en la forma de hacer de su empresa.
• Competencias técnicas y empresariales. Como no, el emprendedor necesita de ciertos conocimientos técnicos y el poder manejar ciertas herramientas técnicas (poder hacer un mínimo plan de negocio – pero no obsesionarse con esto, no va montar la General Motors- poder descubrir su idea y trabajar como traspasarla a la realidad, elementos de comunicación y relación social.etc). Pero por encima de todo esto debe tener presente que él se debe centrar en su idea, el corazón de su negocio es su idea y por lo tanto su fuerte, más que en lo técnico, debe estar en saber liderar el desarrollo de la idea. Deberá aprender cosas, pero no debe obsesionarse por saber de todo. Es mejor contar con la ayuda de algún experto en ocasiones (temas jurídicos, o de marketing, o de producción..etc) No debe desviar sus esfuerzos del camino del liderazgo de su idea. Obviamente mejor si tiene estudios, estará más preparado para las adversidades y resolución de problemas, pero ha habido grandes emprendedores, que se han convertido a su vez en grandes empresarios que partían de una baja formación. Pero han sabido hacer lo principal, que es liderar el desarrollo y crecimiento de su idea.
Estamos preparando un programa de formación en emprendimiento para formadores en la enseñanza básica y profesional, muy centrado en el desarrollo de estas competencias. Ya os mantendré informado de cómo va el programa. De todas formas aquellos que querías más información os podéis poner en contacto conmigo a través de Linkedin http://www.linkedin.com/in/fernandoginer y obtener información al respecto en http://www.redemprendizajes.org/
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